"Ahora bien, la Cuesta del Agua propone una concentración definitiva. Yo no logré mantenerla y huí en otras de mis dispersiones. ¡No sin razón Pablo Inaudi me llamó algunas veces Padre de los piojos y Abuelo de la Nada! (...) -¡Pablo!-gritó- ¿?Soy todavía el Abuelo de la Nada? (fragmentos del libro "El banquete del severo Arcangel" del escritor argentino Leopoldo Marechal)"